Gente Maravillosa

jueves, 29 de noviembre de 2012

Pedí mi libro...





Pedí mi libro y una anciana me lo entregó con una sonrisa en la cara y me regaló el joyero, ya que lo había conseguido abrir.                                
Aquella experiencia había sido mágica y como dice la carta ojalá algún día conozca al responsable de todo esto. Fui a recoger las cosas a la tienda de Suzanne, vi como se había encariñado con él la hermanita de Roxy, así que le dije que siempre que quisiera podía venir a verlo, Alex se puso muy contenta. La sonrisa de aquella niña hacía sentirme muy bien, la verdad es que lo había pasado muy mal por culpa de una leucemia pero ya hace tiempo que se le había curado del todo. Cogí mis cosas y le dejé a la niña que se quedara con Bo toda la noche. Llegué a casa y subí a mi habitación entonces me di cuenta que había un marca páginas en él había escrito una dirección de email, encendí mi portátil y mientras se iniciaba me puse un pijama de corazones, inicie mi cuenta de Hotmail y agregué la dirección del marca páginas para el chat, estaba conectado, tenía como imagen de perfil una amanecer en la playa precioso, no quería precipitarme al hablarme pero me moría de ganas por dentro, respiré hondo y sonó un pitido que me indicó que alguien me había hablado, fue rápidamente a ver quien pero me había agregado en un chat de grupo Eric y Roxy, un poco decepcionada les saludé.
Eric: Hola chicas ¿que tal?
Roxy: Helloooo yo requeté bien como siempre
Elle: Hola chicos
Roxy: Pareces triste ¿que te pasa?
Elle: Eres increíble guapa siempre adivinas como me siento, me ha ocurrido una cosa rarísima, te llamo y te lo cuento
Roxy: Okey
Eric: Oye que esto es un chat de grupo yo también tengo derecho a saberlo ¿no?
Roxy: Lo siento guapito de cara son cosas de chicas y estoy más que segura que tu no lo eres
Elle: Tranquilos no os piquéis además Eric un poco de razón tiene Rox son cosas de chicas pero que sepas que ya te lo contaré
Eric: Muchas gracias guapa, bueno chicas me voy que Lucie quiere usar el ordenador. Byeee
Roxy: Bye bye nos vemos mañana
Elle: Adiós
El chat se cerró y en la pantalla del Hotmail alguien le había hablado ¿sería él?  





        

lunes, 19 de noviembre de 2012

Era un pequeño...




Era un pequeño colgante con una llave de plata y una flor, era precioso enseguida me lo puse. Había algo más, un pequeño papelito con una dirección. Me sonaba la dirección pero no la reconocía decidí seguir hasta ella, llegué y recordé porque me sonaba el lugar, es el lugar donde solían ocurrir los cuentos que mi abuelo me solía contar de pequeña, él siempre soñó con visitar Londres y sabía más que nadie sobre ella pero nunca llegó a conocerla, tenía una foto de una tienda de antigüedades de esa zona, esa era la dirección. Entré, no había nadie así que me puse a mirar y un pequeño joyero de metal me llamó la atención tenía el dibujo de una rosa, muy parecido al de la llave, me descolgué el colgante de cuello e lo introduje en la cerradura encajaba perfectamente giré la llave tres vuelta y media hasta que la pude abrirlo, dentro había una sobre gris con una rosa dibujada, no había nada más, cogí la carta que a diferencia de las demás pesaba un poquito, por instinto me lo lleve a la nariz, olía a canela. Lo abrí, en él se encontraban un fotos de París, Roma, España y Nueva York, eran fotos preciosas y cada una de ellas tenía algo especial, aunque no sabría decir el qué, no encontré ningún papel en el sobre. En ese momento una foto resbaló de mis manos y fue a parar al suelo boca abajo, me di cuenta de que ponía algo, di la vuelta a todas las fotos y conseguí formar la frase:                                                                        
Enhorabuena, pide tu libro aquí, has ganado y 
la verdad me ha encantado jugar contigo, 
ojalá algún día nos conozcamos.                         
Que nadie te quite la sonrisa.